Nombre del autor:María Sánchez Sergueeva

Yorgos Seferis. «Eurípides el ateniense»

EURÍPIDES EL ATENIENSE

Envejeció entre las llamas de Troya
y en las canteras de Sicilia.

Gustaba de las grutas en la playa y de los paisajes del mar.
Vio las venas de los hombres
como una red donde los dioses nos atrapan como a alimañas;
intentó romperla.
Era hosco y escasos fueron sus amigos;
llegó la hora y los perros lo despedazaron.

(Traducción de Pedro Bádenas, ed. Alianza)


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Zoe Akins. Poema «SAPPHO TO A SWALLOW ON THE GROUND»

Safo me ha hechizado,
cercada estoy por sus versos.
Nada puedo…


Una golondrina se acerca a Safo, ¿es acaso la personificación de Eros? El vuelo de la golondrina y el cambio de las estaciones simbolizan el paso del tiempo. Al igual que la hierba pierde el vigor de su color por el sol y por la lluvia, el dolorido corazón de Safo se quema de amor y se inunda de sollozos. Expresa que tiembla sin ni siquiera haberle besado y su voz se apaga en su interior sin poder pronunciar una palabra, tan solo un gemido1. Se siente como una niña que está perdida, pues busca en vano a Faón, al igual que una niña huérfana que busca a su madre que no puede encontrar.
Ella busca respuestas y le pregunta a la golondrina si se ha cansado de volar tan alto, pero no le responde. Se compara con el amor que se cansa del largo y rápido vuelo, ya que es largo porque el amor correspondido tarda mucho y rápido porque es efímero. El agridulce2 amor viene, pero no siempre se queda, tal y como la golondrina más tarde se desvanece.
Ante esta situación, ¿qué luz hay? Si la llama de su pasión se ha apagado, todo está oscuro. El crepúsculo y los rayos apagados del sol simbolizan la muerte. De la misma manera que la golondrina emprende su vuelo, Safo desea volar pero para huir y no regresar nunca más a la tierra. Su alma volará hasta alcanzar el cielo, mientras que su tenue cuerpo será acogido por las olas del mar. Una vez que llegue el ocaso, Faón la hallará muerta.

Sappho à Leucate. Antoine-Jean Gros, 1801.

SAPPHO TO A SWALLOW ON THE GROUND

WHAT wakes the tender grasses where I lie?
What small soft presence stirs and flutters by?
Swallow, oh swallow,
Why have you left the tree-tops and the sky?

The grass is faded by the sun and rain,
The summer passes, autumn comes again,
Swallow, oh swallow,
And bitter-sweet love trembles into pain.

The heart of earth grows weary, and her eyes
Are closed; her lips are tuned to languid sighs,
Swallow, oh swallow,
And in my throat the singing sobs and dies…

Night-long by blown seas musical with wind,
I flutter like a lost child, weak and blind,
Swallow, oh swallow,
After the mother whom she cannot find…

Through apple-boughs the murmurous breezes sing,
As waters from a cool deep-shaded spring,
Swallow, oh swallow,
And slumber streams from leaves left quivering.

Have you grown weary of the heaven’s height,
The hidden stars, the vivid depths of light,
Swallow, oh swallow,
As love grows weary of the long swift flight?

You do not answer but your wings are spread,
And past the top-most apple, sweet and red,
Swallow, oh swallow,
In flight and song you vanish over-head!

I too will give my heart unto the heaven!
Phaon shall find me through the dusk of even,-
Swallow, oh swallow,
Shaken with kisses ere they have been given.

As from the swarming hive in nuptial flight
The queen ascends, all golden fire and light,
Swallow, oh swallow,
On wings of ecstasy I rise to-night!

But to the earth my flight shall not return,
For when the sun-like flame has ceased to burn,
Swallow, oh swallow,
The Lesbian Sea shall be my funeral urn.

Zee Akins «SAPPHO TO A SWALLOW ON THE GROUND» , 1910.

¿Qué despierta la suave hierba en la que yazco?
¿Qué pequeña suave presencia se agita y revolotea alrededor?
Oh golondrina, golondrina,
¿Por qué has abandonado las copas de los árboles y el cielo?

La hierba está descolorida por el sol y por la lluvia,
El verano se marcha y llega de nuevo el otoño,
Oh golondrina, golondrina,
Y el agridulce amor tiembla por el dolor.

El corazón de la tierra se cansa y sus ojos
están cerrados; sus labios se han adaptado a los lánguidos suspiros,
Oh golondrina, golondrina
Y en mi garganta el canto solloza y muere…

Durante toda la noche al lado de musicales mares agitados por el viento,
Revoloteo como una niña desubicada, débil y ciega,
Oh golondrina, golondrina,
Que va en busca de la madre que no puede encontrar…

A través de las ramas de los manzanos las susurrantes brisas cantan
Semejantes a las aguas de un fresco y sombreado manantial,
Oh golondrina, golondrina
Y el sueño fluye de las hojas temblorosas.

¿Te has cansado de la altura del cielo,
De los astros escondidos, de las vívidas profundidades de luz
Oh golondrina, golondrina,
Al igual que el amor se cansa del largo y rápido vuelo?

No respondes, pero tus alas están desplegadas,
¡Y, tras el manzano más elevado, dulce y rojo,
Oh golondrina, golondrina,
Volando y cantando te desvaneces en lo alto!

¡Yo también le entregaré al cielo mi corazón!
Faón me encontrará en el crepúsculo,
Oh golondrina, golondrina,
Conmovida por unos besos antes de que me los haya dado.

Como desde el aleteante enjambre con un vuelo nupcial
La abeja reina asciende, toda ella de dorado fuego y luz,
Oh golondrina, golondrina,
¡Con alas de éxtasis me elevo esta noche!

Pero mi vuelo no deberá volver a la tierra,
Porque una vez que la llama semejante al sol haya parado de arder,
Oh golondrina, golondrina,
El mar lesbio será mi urna funeraria.

  1. Estos síntomas del amor aparecen también en el fr. 31 de Safo. ↩︎
  2. El amor descrito como bestia agridulce aparece en el fr. 130 de Safo. ↩︎

Citar este post:

Sánchez Sergueeva, M. (2 de junio de 2024). Zoe Akins. Poema «SAPPHO TO A SWALLOW ON THE GROUND». Epistemomanía. https://epistemomania.com/zoe-akins-poema-sappho-to-a-swallow-on-the-ground/

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Antonio Colinas. Canto X «Mientras Virgilio muere en Bríndisi»

Canto X

Mientras Virgilio muere en Bríndisi no sabe
que en el norte de Hispania alguien manda grabar
en piedra un verso suyo esperando a la muerte.
Éste es un legionario que, en un alba nevada,
ve alzarse un sol de hierro de entre los encinares,
Sopla un cierzo que apesta a carne corrompida,
a cuerno requemado, a humeantes escorias
con oro, en las que escarban con sus lanzas los bárbaros.
Un silencio más blanco que la nieve, el aliento
helado de las bocas de los caballos muertos,
caen sobre su esqueleto como petrificado.
«Oh dioses, ¿qué locura me trajo hasta estos montes
a morir y qué inútil mi escudo y esta espada
contra un amanecer de hogueras y de lobos?
En mi villa de Cumas un aroma de azahar
madurará en la boca de una noche azulada
y mis seres queridos pisarán ya la yerba
segada o nadarán en playas con estrellas.»
Sueña el sur el soldado y, en el sur, el poeta
sueña un sur más lejano; mas ambos sólo sueñan,
en brazos de la muerte, la vida que soñaron.
«No quiero que me entierren bajo un cielo de lodo,
que estas sierras tan hoscas calcinen mi memoria.
Dioses míos: cómo odio la guerra mientras siento
gotear en la nieve mi sangre enamorada.»
Al fin, cae la cabeza hacia un lado, y sus ojos
se clavan en los ojos de otro herido que escucha:
«Grabad sobre mi tumba un verso de Virgilio».

Antonio Colinas, Noche más allá de la noche , 1980-1981.

Cada vez que leo este poema no puedo evitar preguntarme en qué verso estaría pensando Colinas para la tumba del legionario y me acuerdo de esta inscripción en piedra caliza, hallada en Peñalba de Villastar (Teruel), y que contiene 2 versos de la Eneida de Virgilio:

Tempus erat quo prima quies mortalibus aegris / inc[ipit] (Aen. II, 268-269)

Era la hora en la que empieza el primer descanso para los dolientes mortales (Aen. II, 268-269)

Llama la atención que debajo de la cita virgiliana aparezca inscrito Nescio qui (Desconozco quién). Podría tratarse de que la misma persona u otra, pues a mí me parece que la caligrafía no coincide con la cita de arriba, lo escribiese al preguntarse de qué autor son los versos. Otra posibilidad, si se interpreta como Nescio qui[d] (Desconozco qué), podría ser que quien lo inscribió no se acordaba de cómo seguía el verso 269 inc[ipit et dono diuum gratissima serpit].

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Arquíloco fragmento 122

Arquíloco fr. 122

χρημάτων ἄελπτον οὐδέν ἐστιν οὐδ᾿ ἀπώμοτον
οὐδὲ θαυμάσιον, ἐπειδὴ Ζεὺς πατὴρ Ὀλυμπίων
ἐκ μεσαμβρίης ἔθηκε νύκτ᾿, ἀποκρύψας φάος
ἡλίου †λάμποντος, λυγρὸν† δ᾿ ἦλθ᾿ ἐπ᾿ἀνθρώπους δέος
ἐκ δὲ τοῦ καὶ πιστὰ πάντα κἀπίελπτα γίνεται
ἀνδράσιν· μηδεὶς ἔθ᾿ ὑμέων εἰσορέων θαυμαζέτω
μηδ᾿ ἐὰν δελφῖσι θῆρες ἀνταμείψωνται νομὸν
ἐνάλιον, καί σφιν θαλάσσης ἠχέεντα κύματα
φίλτερ᾿ ἠπείρου γένηται, τοῖσι δ᾿ ὑλέειν ὄρος.

No hay nada inesperado ni que se jure como imposible
ni nada sorprendente, cuando Zeus, padre de los olímpicos,
puso la noche en lugar del mediodía, ocultando la luz
del brillante sol, y un funesto miedo sobrevino a los humanos,
por ello todo les resulta creíble y esperable
a los hombres. Que ninguno de vosotros se sorprenda al observarlo,
ni siquiera cuando las fieras intercambien con los delfines su zona
marina ni cuando las estruendosas olas del mar a ellas
les sean más queridas que la tierra; pero a ellos, la boscosa montaña.

Fresco minoico

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Sánchez Sergueeva, M. (25 de mayo de 2024). Arquíloco fragmento 122. Epistemomanía. https://epistemomania.com/arquiloco-fragmento-122/

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Sappho. Translation of the «Tithonus poem» or «Old Age poem»

The Tithonus poem by Sappho (fragment 58)

ὔμμες πεδὰ Μοίσαν ἰ]ο̣κ[ό]λ̣πων κάλα δῶρα, παῖδες,
σπουδάσδετε καὶ τὰ]ν̣ φιλάοιδον λιγύραν χελύνναν·
ἔμοι δ’ ἄπαλον πρίν] π̣οτ̣’ [ἔ]ο̣ντα χρόα γῆρας ἤδη
ἐπέλλαβε, λεῦκαι δ’ ἐγ]ένοντο τρίχες ἐκ μελαίναν·
βάρυς δέ μ’ ὀ [θ]ῦμο̣ς̣ πεπόηται, γόνα δ’ [ο]ὐ φέροισι,
τὰ δή ποτα λαίψηρ’ ἔον ὄρχησθ’ ἴσα νεβρίοισι.
τὰ <μὲν> στεναχίσδω θαμέως· ἀλλὰ τί κεν ποείην;
ἀγήραον ἄνθρωπον ἔοντ’ οὐ δύνατον γένεσθαι.
καὶ γάρ π̣[ο]τ̣α̣ Τίθωνον ἔφαντο βροδόπαχυν Αὔων
ἔρῳ φ̣. . α̣θ̣ε̣ισαν βάμεν’ εἰς ἔσχατα γᾶς φέροισα[ν,
ἔοντα̣ [κ]ά̣λ̣ο̣ν καὶ νέον, ἀλλ’ αὖτον ὔμως ἔμαρψε
χρόνῳ π̣ό̣λ̣ι̣ο̣ν̣ γῆρας, ἔχ̣[ο]ν̣τ̣’ ἀθανάταν ἄκοιτιν.

Girls, pursue the beautiful gifts of the Muses with purple girdle
and the sweet lyre song-loving.
Old age has already consumed my once smooth skin
and my hair has turned from black to white.
My heart has become a burden, my knees no longer bear my body,
once they were as agile in dance as the little fawns.
I often lament this, but what can I do?
Is not possible for a human to be ageless.
For they say Tithonus was carried by the rosy-fingered Dawn,
being love the reason, to the farthest parts of the earth,
He was beautiful and young, yet he was reached
by the gray old age, despite having an immortal wife.

Photo of the Papyrus P.Koeln.inv. 21351+21376 . At the top right the fifth line can be read: βάρυς δέ μ’ ὀ [θ]ῦμο̣ς̣ πεπόηται

References:
Obbink, D (2010): “Sappho Fragment 58-59: Text, Apparatus Criticus, and Translation.” InThe New Sappho on Old Age: Textual and Philosophical Issues. Harvard University Press.
West, M. L. (2005): “The New Sappho.” Zeitschrift Für Papyrologie Und Epigraphik 151: 1–9.

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Anacreontea fragment 40

Anacreontea fr. 40

ἐπειδὴ βροτὸς ἐτεύχθην
βιότου τρίβον ὁδεύειν,
χρόνον ἔγνων ὃν παρῆλθον,
ὃν δ᾿ ἔχω δραμεῖν οὐκ οἶδα.
† μέθετέ με, φροντίδες· †
μηδέν μοι χὔμιν ἔστω.
πρὶν ἐμὲ φθάσῃ τὸ τέλος,
παίξω, γελάσω, χορεύσω
μετὰ τοῦ καλοῦ Λυαίου.

Since I was born mortal
to walk the path of life,
I know the passing of time,
but I don’t know how much I have left.
¡Worries, leave me alone!
Let nothing be between you and me.
Before death reaches me,
I will play, laugh and dance
with the beautiful Dionysus.

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Sappho fragment 31

Sappho depicted in the Parnassus painting by Raphael, 1509.

Sappho fragment 31

φάινεταί μοι κῆνος ἴσος θέοισιν
ἔμμεν ὤνερ, ὄττις ἐναντίος τοι
ἰσδάνει καὶ πλάσιον ἆδυ φωνεί-
.σας ὐπακούει

καὶ γελαίσας ἰμερόεν τό μ᾽ ἦ μάν
καρδίαν ἐν στήθεσιν ἐπτόησεν·
ὠς γὰρ εἰσίδω βροχέως σε, φώνας
.οὐδὲν ἔτ᾽ ἴκει·

ἀλλὰ κάμ μὲν γλῶσσα ἔαγε, λέπτον
δ᾽ αὔτικα χρῷ πῦρ ὐπαδεδρόμηκεν,
ὀππάτεσσι δ᾽ οὐδὲν ὄρημ᾽,ἐπιρρόμ-
.βεισι δ᾽ ἄκουαι.

καδ δέ μ᾽ ἴδρως κακχέεται, τρόμος δὲ
παῖσαν ἄγρει, χλωροτέρα δὲ ποίας
ἔμμι, τεθνάκην δ᾽ ὀλίγω ᾽πιδεύης
.φαίνομαι […].

ἀλλὰ πᾶν τόλματον …

Equal to the gods seems to me that man
who in front of you sits
and listens nearby to you while
you speak sweetly

and while you laugh charmingly, truly this
excited my heart inside my breast.
When I briefly glance at you,
I’m speechless.

My tongue has been torn, a subtle
fire swiftly flows through my skin.
Nothing I see with my eyes
and my ears buzz.

Over me a sweat pours, a trembling
seizes me entirely, I’m more wet than grass
and seems to me that I’m on the verge
of death.

But everything must be endured…


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Safo fr. 1 «Himno a Afrodita»

Safo. Himno a Afrodita (fr. 1)

ποικιλόθρον’ ἀθανάτ’ Ἀφρόδιτα,
παῖ Δίος δολόπλοκε, λίσσομαί σε,
μή μ’ ἄσαισι μηδ’ ὀνίαισι δάμνα,
πότνια, θῦμον,

ἀλλὰ τυίδ’ ἔλθ’, αἴ ποτα κἀτέρωτα
τὰς ἔμας αὔδας ἀίοισα πήλοι
ἔκλυες, πάτρος δὲ δόμον λίποισα
χρύσιον ἦλθες

ἄρμ’ ὐπασδεύξαισα· κάλοι δέ σ’ ἆγον
ὤκεες στροῦθοι περὶ γᾶς μελαίνας
πύκνα δίννεντες πτέρ’ ἀπ’ ὠράνωἴθε-
ρος διὰ μέσσω·

αἶψα δ’ ἐξίκοντο· σὺ δ’, ὦ μάκαιρα,
μειδιαίσαισ’ ἀθανάτῳ προσώπῳ
ἤρε’ ὄττι δηὖτε πέπονθα κὤττι
δηὖτε κάλημμι

κὤττι μοι μάλιστα θέλω γένεσθαι
μαινόλᾳ θύμῳ· τίνα δηὖτε πείθω
ἄψ σ’ ἄγην ἐς ϝὰν φιλότατα; τίς σ’, ὦ
Ψάπφ’, ἀδικήει;

καὶ γὰρ αἰ φεύγει, ταχέως διώξει,
αἰ δὲ δῶρα μὴ δέκετ’, ἀλλὰ δώσει,
αἰ δὲ μὴ φίλει, ταχέως φιλήσει
κωὐκ ἐθέλοισα.

ἔλθε μοι καὶ νῦν, χαλέπαν δὲ λῦσον
ἐκ μερίμναν, ὄσσα δέ μοι τέλεσσαι
θῦμος ἰμέρρει, τέλεσον, σὺ δ’ αὔτα
σύμμαχος ἔσσο.

Oh inmortal Afrodita de adornado trono,
urdidora e hija de Zeus, te suplico
que no domines con sufrimiento y dolor
mi corazón, oh soberana,

sino que vengas aquí, si alguna vez
a lo lejos escuchaste y atendiste a mis súplicas
y, tras abandonar la casa de tu padre,
acudiste

en el dorado carro uncido. Bellos
y veloces gorriones te trajeron a la negra tierra,
batiendo rápidamente las alas desde el cielo
por el medio del aire.

En seguida llegaron. Tú, oh dichosa,
con una sonrisa en tu rostro inmortal
me preguntaste por qué sufro otra vez
y por qué de nuevo te imploro

y qué es lo que más deseo con mi corazón desenfrenado.
«¿Pero esta vez a quién voy a persuadir
para guiarle hacia tu afecto? ¿Quién, oh Safo,
te aflige?

Pues si huye, pronto te perseguirá;
si no acepta los regalos, te los dará;
si no te ama, pronto te amará,
incluso si no quiere.»

¡Ven hacia mí ahora y libérame de las dolorosas
preocupaciones! ¡Y haz todo cuánto
mi corazón desea que se cumpla y sé tú misma
mi aliada!

Citar este post:

Sánchez Sergueeva, M. (23 de mayo de 2024). Safo fr. 1 «Himno a Afrodita». Epistemomanía. https://epistemomania.com/safo-fr-1-himno-a-afrodita/

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Anacreónticas fragmento 40

Anacreónticas fr. 40

ἐπειδὴ βροτὸς ἐτεύχθην
βιότου τρίβον ὁδεύειν,
χρόνον ἔγνων ὃν παρῆλθον,
ὃν δ᾿ ἔχω δραμεῖν οὐκ οἶδα.
† μέθετέ με, φροντίδες· †
μηδέν μοι χὔμιν ἔστω.
πρὶν ἐμὲ φθάσῃ τὸ τέλος,
παίξω, γελάσω, χορεύσω
μετὰ τοῦ καλοῦ Λυαίου.

Puesto que nací mortal
para recorrer el camino de la vida,
sé cuánto tiempo ha transcurrido,
pero no cuánto me queda por recorrer.
Preocupaciones, ¡dejadme en paz!
Que no haya nada entre nosotros.
Antes de que me alcance la muerte,
voy a jugar, reír, y bailar
con el bello Liberador1 Epíteto de Dioniso.

Dioniso con sátiros. Detalle del interior de un kylix de figuras rojas, 575 a.C.

Dioniso como dios liberador también aparece en Anacreónticas fr. 45 y fr. 45B.

Véase también el «tempus fugit» en la Antología Griega.

Citar este post:

Sánchez Sergueeva, M. (21 de mayo de 2024). Anacreónticas fragmento 40. Epistemomanía. https://epistemomania.com/anacreonticas-fragmento-40/

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